Una lucha fratricida en la oposición sería la repetición de un grave error de la democracia civil.

Hoy en día todos sabemos que la democracia civil no es lo mejor que le pudo haber pasado a Venezuela, era perfectible.

La democracia civil llegó como resultado del fracaso del militarismo y superando el acoso del castro comunismo.

Pero sus máximos dirigentes, una generación de la que deberíamos sentirnos orgullosos, se ensañaron en una lucha "fratricida" por reconquistar o mantener el poder, le agarraron el gusto y olvidaron la lucha contra el militarismo y el acoso comunista, permitieron que estos dos males se unieran y de esa unión resultaramos gobernados por una especie de Monstruo Milton.

Habían comenzado pues usando todos los cartuchos contra el militarismo y castro comunismo pero aprendieron a dispararse entre ellos sin dejar cartuchos para los peores enemigos.

Si por cada dos que se dispararán entre ellos hubiesen soltado uno contra los enemigos en común, si hubiesen defendido la obra de la democracia civil aunque se siguieran peleando la historia habría sido otra, pero al final de la historia habían corruptos que no eran demócratas y demócratas muy débiles, les pegó la edad.

Es fácil recordar los hechos de corrupción de Carlos Andres Perez, Jaime Lusinchi y los amigos de Luis Herrera pero es difícil recordar las buenas obras (que fueron muchas) porque quienes debían promoverlas protegían silenciosamente al enemigo, limpiandole el camino por donde avanzaba.

Así se perdió la democracia civil, frente al comunismo montado en hombros del militarismo para llevar a Venezuela al peor periodo de la historia contemporánea.

Pero eso ya es historia, que está pasando ahora?

Después de años de tropiezos de esos mismos personajes, unos se fueron a gobernar con el enemigo, los que no tenía los valores definidos y los que se quedaron no tenían la preparación para enfrentarlo porque quienes formaban aquella generación "dorada" también olvidaron formar a la de relevo, el clientelismo político arropó a los segundos.

Ahora, cuando pareciera haber una nueva oportunidad comienzan una guerra feroz entre Patricia Poleo y Leopoldo Lopez, nadie dice que ninguno de los dos haya aportado en la lucha contra el régimen, nadie duda del compromiso de cada uno con el futuro del país ni del derecho que les da la libertad de expresión, lo contrario sería caer en uno de los vicios que hemos venido cuestionando.

El punto es que al entrar en esa lucha olvidan seguir cerrando el camino al enemigo a vencer.

El país necesita que nos enfoquemos en salir del régimen y que lógicamente se preocupen por la ética del gobierno por venir, pero los argumentos tan bajos que están usando frente a un ciudadano politicamente manipulable nos pone en riesgo de que lleguen a creer que mejor seguir sufriendo que caer en algo peor que el narco terrorismo comunista militarista.

El llamado es a la conciencia, si tienen denuncias serias sobre hechos pasados o presentes deben hacerla, nadie pide complicidad pero tratemos de no descuidar al régimen.

Vamos por una mejor Venezuela, el país necesita que por cada tiro entre ustedes le lancen 2 al régimen, flores al ciudadano y a la necesidad de construir un mejor porvenir.

Amanecerá y veremos...

Gracias por llegar a esta línea...

C.R.3.