Un mensaje de esperanza inesperado

Al verla supe que me miraba con sus brillantes ojos azules, no pude apartar la mirada porque había una fuerza en ella que no permitía quitarle la vista.
Se acercó a mi con su cabellera larga y dorada moviendose a cada paso que daba.
"Buenas noches, mi nombre es Sandra, puedo sentarme", (El nombre no era realmente ese pero  asi la llamaré en este escrito) me dijo. Aparté el jugo y le hice un espacio.
Comenzó a hablarme de una vida interesante y arriesgada, era la suya. Su rostro era realmente angelical, tal vez por el azul de sus ojos que le adornaban. Sandra era una niña, me inspiraba admiración y respeto. El jean y su franela le daban una apariencia sencilla y hermosa, recatada, sin mostrar mas que la hermosura de una piel que se veía bastante delicada.
Hablamos del amanecer, del sol, de esos regalos divinos que llamamos bendiciones y de como a veces parecen también una invitación a hacer algo por el rescaté de la fé. Fé que no vimos como creer en Dios simplemente, ni siquiera saber que existe sino ademas sentir su presencia, muchos de quienes dicen conocer a Dios lo han hecho a través de las escrituras, allí el se muestra tal y como es, otros en cambio han sentido su presencia y estan los que hacen un acto de fé a las palabras de sus predecesores, de sus formadores.
La oscuridad también estuvo presente en la conversación, representada por esas cosas de la que, aun no siendo graves no nos sentimoa orgullosos y que noa toca vivir con ellas y a pesar de ellas, son una oportunidad para el arrepentimiento, para pedir perdón.
La pureza de las acciones, de la palabra, la pureza como objetivo, la esperanza en positivo, esa que es la base de ese compromiso sellado por personas como Sandra, quien apenas tiene unos meses en su trabajo con Dios. Finalmente hablamos del sacrificio, del camino a la salvaciôn, de como manifestar el agradecimiento por tantos regalos divinos, el milagro de nacer, de vivir y de tener acceso al perdón.
Sandra comentó también como decidió dejarlo todo para convertirse en una empleada de Dios, una multiplicadora se su mensaje.
Pero que hace diferente a Sandra de esas personas que andan predicando de puerta en puerta?. La respuesta es que Sandra lo hace de puerto en puerto, Sandra literalmente lo dejo todo y se monto en un barco donde toda la tripulación anda alrededor del mundo llevando el mensaje, mas de 50 nacionalidades y un solo objetivo.
Seguramente no será fácil volver a ver a Sandra, pero su mensaje espero recordarlo siempre, y es la manera extraordinaria en que llegó lo que lo hace especial.
Conocer a Sandra me lleva a reflexionar una vez acerca del valor de las personas, de el nivel ético y de respeto que debemos mantener al relacionarnos porque no sabemos como los demas perciben nuestra expresión, y mas allá de su percepción está también lo que transmitimos, lo que conscientemente exponemos de nosotros porque nuestra imagen interna si es importante no solo para nosotros mismoa sino también para alguien que sabe cuando actuamos de manera natural y cuando lo hacemoa en base a simples normas impuestas por una sociedad acelerada y desubicada en muchas areas de la vida.
Pensar antes de actuar no nos quita la condición natural, no nos hace perder la esencia del ser humano.
Gracias a Sandra mi semana terminó feliz.

Gracias por llegar hasta esta linea...

C.R.3