Cuando la familia tiene la más alta prioridad (Feliz cumple mi niño)

Que maravillosa es la mente, es como si sirviera para ahorrar recuerdos, si, una caja fuerte de memorias. Allí va lo que consideramos que vale la pena usar en el futuro.

A mi mente llegan hoy las mujeres de mi familia y no, no voy a destacar que son unas guerreras, excelentes madres y muy buenas personas. No!, porque resulta que son culpables de algo, de mi adicción a los quesillos, creo que son las mejores en eso.

Cuando decidir salir de mi zona de confort (rodeado de quesillos) me encontré con la cruel realidad de que ya no era el quesillo familiar, así que me tocó aprender a hacerlo y con el tiempo empecé a prepararlos para mi carajito, que apenas lo probaba.

Pero esta semana compré uno (si, no era familiar) y prácticamente me lo expropió y se lo comió casi todo, pero además me pidió que le hiciera uno para su cumpleaños así que es un trato entre hombres serios.

Pasemos la página con los quesillos para entrar a la conversación mientras el se lo comía con un helado y yo me tomaba un excelente capuchino.

- Papá, ya entendí lo de las prioridades, quiere decir que hay cosas más importantes que otras.

- A ver, cuéntame

- La familia es más importante que la escuela y el trabajo. El miércoles no debería ir a la escuela ni tu al trabajo porque es mi cumpleaños y yo soy más importante.

- Bueno si, pero olvidas un detalle, tienes un examen muy importante ese día.

- Si, pero un examen no es más importante que la familia.

- Tienes razón pero la hora de la escuela no es el único momento en que nos podemos reunir, al salir del trabajo te busco y nos vamos a ver que se nos ocurre. Te parece buena idea?

- Si, sabes?, este es el último helado que me comeré teniendo ocho años.

Y de allí en adelante comenzó con esos acertados pronósticos sobre su cumpleaños que me recuerdan los de los equipos de béisbol cuando están virtualmente eliminados solo que, en su caso es al revés, somos un equipo clasificado para grandes momentos que nos depara el destino, que nos ofrece la vida.

Y como un equipo nos fuimos con unas sonrisas que los tapabocas no podían borrar.

Que grande es mi carajito.

Gracias por llegar a esta línea...

C.R.3.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Mas sobre el tema del corona virus.

Mis canas, mis años, mi vida

Cumpleaños con velas y no con balas.