Venezuela resignada
Tengo la impresión de que la gente en Venezuela vive como en corral de matadero, con la sensación de que pronto llegará su turno o el de alguien cercano. Hago esta afirmación pensando en la inseguridad, pero pareciera que el matadero es de esperanzas.
Muchos Venezolanos en el país, esperan resignados su turno de quedarse sin empleo, de que sus ingresos se vuelvan inservibles o de que ellos o uno de los suyos sufra una enfermedad que requiere medicamentos imposible de encontrar.
Hay quienes afirman que está visión o cualquiera que venga de alguien que no vive en Venezuela es incorrecta sólo por esa razón, la verdad es que cuando estás fuera de la frontera y te han asesinado 6 o más familiares, cuando tienes varios sin empleos, enfermos que requieren medicina o tratamientos con equipos no disponibles, o en general, cuando los ingresos no les permite satisfacer las necesidades básicas, tienes tanta o más información que muchos que viven en el.
Venezuela esta gobernada por violentos, con violentos, en pro de la miseria y de la violencia misma. Muchos dirán que es absurdo porque no todos son violentos, delincuentes o no todos sienten el mismo efecto de la crisis y tienen razón, pero es que afortunadamente ese es otro fracaso del régimen, el no alcanzar el 100% de esa meta.
Anteriormente se educaba para la excelencia pero no todos la alcanzaban, por diversas razones que están fuera de contexto, además es factor común en muchas naciones, ahora se educa para la violencia, la vagancia y afortunadamente no salen todos vagos o delincuentes en un sistema en el que los padres le discuten al maestro que su hijo no puede perder el año escolar aún no sabiendo porque la ley los obliga a aprobarlos como sea.
La educación en épocas anteriores tenía sus fallas, pero era compensada/reforzada por los padres que tenían tiempo para eso. Hoy en día ambos padres trabajan hasta tarde, y dejan esa educación a cargo de una niñera que cumple las exigencias básicas de su empleo y de un sistema educativo que invierte los valores.
La resignación es como un virus propagado por todo el territorio acompañado de la fe en el milagro que pueda hacer un "nuevo Santo" emergido de la política. La gente espera por un revocatorio, una reforma..., por medidas constitucionales tradicionales que no funcionan ante un gobierno de malandros teniendo a la mano una salida constitucional no tradicional, la aplicación de los artículos 333 y 350, la desobediencia civil pacífica y organizada.
Las preguntas obligadas son quien le pone el cascabel al gato? y con qué se come eso?
Una cosa si es segura: No tiene sentido secar el agua derramada hasta que no cerremos la llave, no podemos pretender que con una acción veremos los problemas resueltos como por arte de magia pero si no podemos llevar esos índices macabros a una cifra baja por lo menos si debemos intentar evitar que sigan aumentando en proporción. Hay que frenar al régimen y comenzar JUNTOS a reconstruir la Venezuela hermosa de la que todos nos sentimos orgullosos.
Gracias por llegar hasta esta línea.
C.R.3